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Soy vecina del barrio de Piñones en Loíza y directora y fundadora de la Corporación Piñones se Integra (COPI). Desde las 9:00 o 10:00 a.m. del 4 de julio [de 2020] un grupo de 5 a 6 mujeres voluntarias de COPI, incluyendo a esta servidora, estábamos repartiendo material informativo sobre la contaminación de playas y bolsas plásticas a los visitantes de la playa de Piñones. Realizábamos nuestra labor comunitaria principalmente en el tráfico que tiende a ocurrir en el Puente Boca de Cangrejo en la Carr. 168 en Loíza.

Nos acercábamos a las ventanas de los vehículos en el tapón y le ofrecíamos una corta charla, el material informativo y la bolsa plástica, todo bajo el lema “La basura es tuya, llévatela”. Nosotras le preguntábamos al conductor del carro si iban para a playa y si la persona decía sí, le proveíamos una bolsa de basura y le pedíamos que cuando se fueran que no dejaran la bolsa de basura en la playa.

Esta actividad se realizaba por segunda ocasión, ya que el 28 de junio celebramos el mismo trabajo comunitario en la playa de Piñones. Cuando se abren las playas, se acumula muchísima basura en menos de un mes. Existe un problema con el DRNA [Departamento de Recursos Naturales y Ambientales] y el municipio [de Loiza], ya que no limpian las playas. También denunciamos que el asunto es uno de derechos humanos, porque deberíamos vivir en un ambiente saludable.

A eso de las 10:30 a 11:00 a.m. veo a un oficial de la Policía Municipal de Loiza, que luego identificamos como Kenneth Lacen por un video que tomamos, confrontando a una de las compañeras. Lacen confrontó a la compañera que se encontraba en la calle repartiendo el material educativo.

Cuando las compañeras agrupadas me hacen señas, me dirijo hacia estas. Luego de confrontar a la compañera, Lacen se dirige a nuestro grupo nuevamente donde, con una actitud hostil y agresiva, entabla dialogo conmigo.

El Oficial Lacen acusa al grupo de violentar la ley. Le pregunto al oficial cual es la ley que violentamos y Lacen nos indica que, supuestamente, teníamos que llevar un permiso al municipio y que estábamos obstruyendo el tránsito. Le digo al oficial Lacen que no es posible, ya que es 4 de julio y siempre hay tapón.

En ese momento, busco alejarme del oficial para tener distancia. Lacen citó una ordenanza que prohibía la actividad, la cual le solicite que me la trajera. El oficial le dijo que la traería junto a su supervisor y que denunciaría a su grupo.

“Denúnciame”, le dije al oficial.

Diez minutos luego, el oficial Lacen regresó en motora junto a su supervisor, el oficial Verdejo, en una patrulla. Verdejo hizo todo lo posible para que no se formara ningún problema.

Se bajó con un documento impreso, que resulta ser la Ordenanza Municipal #5. El oficial Verdejo me dijo: “Usted es una mujer inteligente. Lee esto.”

Le dije al oficial que no entendía que una ordenanza no iría por encima de nuestros derechos, así que no me dieron ganas de leerlo. Yo no sentía que era apropiada hacerlo. Pero aún así comencé a leer la ordenanza municipal, la cual establece que no se permiten venta ni colecta.

Le aclaro al oficial Verdejo y a Lacen que nosotras no estábamos haciendo nada de esto. Lacen le amenazó a las voluntarias con decirles “Las voy a denunciar”, pero Verdejo le decía “no hables de denuncias”.

Lacen busca continuar discutiendo conmigo, pero me alejé de la escena y me fui a entregar boletines y bolsas con una de las compañeras. A ella le digo: “Me voy para tu lado, porque él lo que busca es provocarme”.

[El oficial] Lacen me hablaba a mí con más coraje [en comparación] con los demás.

No obstante, Lacen me persigue nuevamente, pero esta vez grabándome con su teléfono. Dos compañera me cubrieron de la cámara por instinto, pero no me escondí. Continué repartiendo material a los visitantes mientras que Lacen me grababa.

Le repetía a cada vehículo con el que interactuaba y le entregaba una bolsa: “¡Buenos días! ¡Bienvenidos a Piñones! Echen la basura aquí porque el municipio no limpia”.

Lacen, en un tono hostil y agresivo me grita: “¡Mentirosa!”

Pasa otro carro y le digo lo mismo. Lacen grita con hostilidad: “¡Eso no le toca al municipio, eso le toca a Recursos Naturales!”

Cuando pasa el próximo carro, le digo al conductor: “¡Buenos días! ¡Bienvenidos a Piñones! Echen la basura aquí porque el municipio no limpia, tampoco Recursos Naturales”.

Nuevamente con una actitud hostil y agresiva, Lacen [me] dice “¡¿Para eso tú querías ser alcaldesa?!”

Le respondo: “Sí, para limpiar por lo menos”.

“Qué bueno que el pueblo te haya colgado”, Lacen me responde.

Siguió hablando de algo, pero traté de no escucharlo porque noté que ya él vino a donde mí sin una ordenanza solida sobre esto. Luego de ser ignorado, el oficial Lacen dejó de grabar y se fue de la escena.

Para mí fue mandado, lo envían porque nosotros promocionamos esto en las redes sociales comparte y el municipio siempre mira la página de COPI.

Más tarde durante el día, llegaron dos oficiales municipales a las facilidades de COPI con una actitud hostil. Era un hombre y una mujer. La mujer era sargento. La Sargento preguntó con un tono hostil y sin dar los buenos días: “¿Quien es la persona encargada aquí?”

Yo respondí a la pregunta y la sargento me dice: “Dejaron un letrero obstruyendo el camino”.

Una de las compañeras intervino en el dialogo y la actitud y el tono de la sargento cambió por completo. La compañera le explicó que las paletas de madera con información son de nosotras y que se les olvidó recogerlas. No obstante, los oficiales le trajeron el letrero.

Habíamos escrito una carta y le notificamos al cuartel de la Policía estatal en Piñones dejándole saber que nos íbamos a manifestar. No le damos fecha exacta, porque debemos panificar y buscar a la gente.

Se supone que esa ordenanza municipal hay que solicitarlas a la oficina de la legislatura, ya que no aparece en línea. La alcaldesa [Sra. Julia María Nazario] es sumamente mediata, así que la pongan [la ordenanza municipal] pública.

Hay un precedente de que la ordenanza solo aplica a grupos en contra de la alcaldesa. Esa denuncia es para Maricruz, pero frente a COPI se detienen una guagua a vender sombrero de playa y no intervienen. Se supone que no venda ahí sobre la acera, pero todo el día hay personas que están haciendo ventas, algunos pagando patenta y otros no.

Ayer me llamó la candidata a la alcaldía del PNP. Ella buscó recaudar fondos en los semáforos, pero Lacen intervino con ellos, aunque la ordenanza dice que se puede hacer colectas en los semáforos.

Ya esto viene por política, porque yo fui candidata en el 2012, y el vicealcalde, o ayudante especial, Rafael Escobar, ese hombre estaba con nosotros en contra Costa Serena. Traicionó la lucha y se fue con el desarrollador.

Buscan echarme la Policía por razones políticas, pero no voy a responder a sus provocaciones. Yo entiendo que esto no es normal. De hecho, por ahí pasaron patrullas de la Policía estatal. Los que conocían a una de las compañeras saludaros y ninguno la detuvo. Otro elemento por la cual fueron mandados. No todos los policías saben que llegó. Así que nosotros hubiésemos cometido un delito.

No, porque yo creo que no estábamos cometiendo un ningún delito y Lacen debió de venir con un tono de orientación y dialogo, y no de acusación.

Mal, porque uno se siente agredido. La informa en que [Lacen] interviene, te saca y te rompe. Acusarte de cometer un delito cuando hacemos un trabajo digno. No era la forma ni lo que debió de pasar. Se siente uno agredida.

Obstrucción bajo la ordenanza municipal #5.

Con una denuncia.